Todos soñamos con despertarnos, abrir la app y ver que nuestra humilde inversión en una memecoin se multiplicó por 20 durante la noche.
Pero junto con la emoción llega el pánico:
“¿Vendo ya y me compro un Lambo… o aguanto a ver si llegamos a Marte?”.
Respira, perro inversor. Aquí te dejo el manual de supervivencia para estos momentos gloriosos (y peligrosos).
🐾 1. No entres en modo FOMO inverso
Así como existe el miedo a quedarse fuera, también existe el miedo a vender demasiado pronto.
Recuerda: nadie atrapa el pico exacto. Si vendes con ganancias, ya ganaste.
💰 2. Asegura parte de las ganancias
Una estrategia común es vender un porcentaje (por ejemplo, el 50%) para recuperar tu inversión inicial y dejar el resto “jugando gratis”.
Así, aunque el precio se desplome, no pierdes tu capital.
🧠 3. Revisa la liquidez y el volumen
Si la liquidez es baja o el volumen cae, podría ser señal de que los primeros en entrar están empezando a vender.
Mejor salir antes de que todos corran hacia la puerta.
⏳ 4. No persigas cada vela
En estos momentos, las gráficas se mueven como un gato con cafeína.
No vendas por cada corrección pequeña, pero tampoco ignores señales claras de venta masiva.
📅 5. Piensa en tus objetivos
¿Querías doblar tu dinero? ¿Multiplicarlo por 10?
Define antes de invertir qué cantidad te haría feliz vender… y respétalo.
💡 Conclusión Wall Street Dogs
Ver tu memecoin irse a la luna es emocionante, pero recuerda: en cripto, las bajadas pueden ser tan rápidas como las subidas. Asegura tus tokens mientras puedas y, si decides dejar algo para el viaje a Marte… que sea por diversión, no por necesidad.
